A Camila y sus amigos nunca les ha gustado comer en el comedor de la escuela, y aún más cuando los almuerzos empiezan a ir de mal en peor. Las cocineras ahora usan gorros, cocinan platos nuevos y sonríen de forma espeluznante. El vigilante les cuenta que hay una nueva jefa de cocina que solía trabajar ahí hace mucho, mucho tiempo. Camila y sus amigos se preguntan por qué ha vuelto y si ella es la razón de este extraño comportamiento. ¡Ay nanita!, ¡están seguros de que las cocineras son malignas y van a ATACAR a la escuela completa!