Piel de deriva es una novela rabiosamente personal en la que Paula Farias, a partir de experiencias propias, nos habla de resistencias, donde los silencios suman tanto como las palabras, y donde el lector, como en las mejores obras de Joseph Conrad, puede llegar a sentirse mecido por la mar y cómplice, con la certeza de que si sigue navegando, llegará a un puerto que desconoce, pero que valdrá la pena